Disfrutar de la berrea en la Sierra de la Demanda es un espectáculo visual y acústico difícil de olvidar.
Con la llegada del otoño, se acortan las horas de luz, los días pasan a ser más frescos y húmedos, llegan las primeras lluvias tras el período estival, y vivimos una explosión de colores donde los bosques se tiñen de tonos rojizos, ocres, anaranjados o dorados. Y en la Sierra de la Demanda tenemos numerosas rutas de otoño para disfrutar en plena naturaleza de esta estación .
Pero si hay un acontecimiento por el que verdaderamente sobresale el otoño en esta zona del sureste burgalés , con permiso de las setas ,es la berrea del ciervo
El Ciervo Ibérico es una especie perteneciente a la familia de los Cérvidos, con una longitud aproximada de 2 metros que puede alcanzar hasta 200 kg de peso. Tiene una coloración rojiza en la primavera y verano que torna en tonos pardos y grisáceos durante el resto del año. Las hembras son menos corpulentas y más pequeñas y se distinguen a simple vista por no presentar cuernas. Son una especie herbívora que se alimenta principalmente de encinas, jaras, romeros, así como pasto, frutos y cereales.
Cada año durante algo más de un mes, desde finales de Septiembre y hasta bien entrado Octubre, retumba el sonido de la berrea en los montes de la Demanda ,siempre teniendo en cuenta que si baja un poco las temperaturas y el tiempo nos trae lluvia se adelanta la berrea , y si es un año seco y de mucho calor la berrea se puede atrasar hasta principios de Octubre. Todo esto se debe al esfuerzo que tienen que hacer los machos con estos bramidos
Comienza así, el período de celo y apareamiento de los ciervos que se caracteriza no solo por el sonido gutural que emiten los machos para llamar la atención de las hembras, sino también por los intensos paseos luciendo sus majestuosas cornamentas, frotándose en las cortezas de los árboles para marcar territorio o luchando con otros machos. Estas fuertes peleas en las que pugnan por asegurar el apareamiento y la posesión de la manada, en algunos casos, les puede llegar a producir la muerte, al quedarse enredados por las cuernas y no poder desligarse.
Es en esta época donde se pueden observar grandes grupos de hembras reunidas y machos merodeando a su alrededor, ya que el resto del año, el macho vive en solitario en lugares más alejados, generalmente en grupos de menos de 5 ejemplares, mientras que las hembras permanecen en grupos grandes con los más pequeños.
Para el avistamiento es recomendable llevar unos prismáticos, preferentemente estabilizados , telescopio terrestre , y un monocular térmico de gran alcance y para la realizacion de documentacion grafica recomendamos llevar una camara reflex con teleobjetivo, una bridge de zoom como la P1000 o digiscoping
La berrea es una oportunidad única de acercarnos a la fauna salvaje .siempre respetando ciertas pautas y normas. No podemos acercarnos , no debemos hacer ningún ruido , ni mucho menos imitar sus sonidos .
Aunque los hábitos de los ciervos suelen ser nocturnos , en época de berrea cambian y las mejores horas para ir a verlos son las primeras horas del día , al amanecer o útimas horas del día con el atardecer .
Igual de importante es el punto donde vayamos a verlo. Tiene que ser una zona boscosa aledaña , alejado de zonas habitadas , con vistas a alguna pradera o zona con buena visibilidad , y preferiblemente en cotas altas.
En la Sierra de la Demanda hay innumerables puntos para verlos, aunque si vamos al Valle de Valdelaguna ( los Tolbaños , Huerta de Arriba y de Abajo…) ,zona alta de Pinares, Neila…podemos ver una mayor concentración de ellos , siempre teniendo en cuenta que son rebaños que tienen mucha movilidad , por lo que todo depende de la suerte y sobre todo de paciencia.